27/3/11

SEMINARIO VII


Sábado: Acompañar el duelo
El momento del nacimiento es una gran fiesta de bienvenida para todos. Trataremos cómo acompañar un proceso doloroso, como puede ser la muerte física y cómo acompañar esa otra muerte, que es el cierre de estar juntos en un solo cuerpo.
Impartido por: Juanjo Juanas comadrona con 26 años de experiencia
 
Domingo: Homeopatía en embarazo, parto y postparto
 
La homeopatía es una herramienta práctica y segura, sin efectos secundarios, que podemos aprender a utilizar en ciertos casos recurrentes durante el maternaje. 
Impartido por: Susana Aikin, homeopata unicista, presidenta de la asociación española de homeopatía clásica unicista.

1 comentario:

  1. Esta formación ya me sorprendió el primer día de clase en septiembre, cuando sin apenas conocernos entre nosotras iniciamos el curso con aquella sesión de renacimiento. Aquel finde entendí que esto no era una formación convencional, e interioricé la idea de que para acompañar a otras mujeres en procesos tan importantes como el embarazo o el parto/nacimiento, una tenía que tener trabajados (o estar en ello) su propio nacimiento. Y ahí empezó el viaje...
    Esta ocasión no era la primera en que hablábamos de muerte en este curso, y sin embargo, fue muy nueva la sensación que nos dejó al acabar el día.
    Lo habíamos empezado con Juanjo Juanas afirmando una de sus verdades: "para hablar de duelo, lo más importante es hablar de vida." Si queremos acompañar a mujeres embarazadas, también tenemos que tener trabajada (o estar en ello), nuestra propia relación con la muerte. Y muchas de nosotras, desde la mañana, ya empezamos a destapar nuestros miedos, nuestro dolor, nuestra rabia, nuestra no aceptación de esta parte del proceso de vida... Así que aquella idea del principio de curso volvió a tomar presencia en nosotras: este curso no es una formación al uso, es un proceso de crecimiento personal donde, para aprender a acompañar a otras, aprendemos a acompañarnos a nosotras mismas.
    Ya en anteriores ocasiones habíamos intercambiado ideas sobre cómo hablar, siendo doulas, con la mujer embarazada de la posibilidad de la muerte de su bebé antes o después de parir, si hablarlo previamente o no, cuánto teníamos que sanar cada una de lo que lleva en su propia mochila. Ahora nos tocaba hablar de qué hacer si esto pasaba, cómo acompañar ese duelo, qué es lo verdaderamente importante en esos momentos, qué sería un buen apoyo en una situación así. Y dos nociones salían como básicas: Dignidad y respeto para morir.
    Hablamos del miedo a nuestra propia muerte y de la idea de muerte como fin; nos preguntamos qué es lo que nace en el nacimiento, y cuando morimos, qué es lo que se va; y poco a poco fuimos compartiendo experiencias y visiones sobre este trance que no partían de verlo como el fin, sino como un paso más del camino, una transformación o un viaje hacia otra vida. Desde esas ópticas, al menos a mí, me resulta más llevadero el acercarme a mis vivencias de muerte, comprender mi dolor para sanarlo, y profundizar en mis miedos para poder agarrarlos y enfrentarlos. Bueno, poco a poco, que no es fácil transformar lo que lleva siendo construido (y convertido en tabú) durante tanto tiempo.
    Sigue dándome muchísimo respeto la posibilidad de acompañar una situación de duelo, y sin embargo, algo se me removió adentro en este seminario, porque ahora ya no siento tanto miedo, confío plenamente en el proceso que es la vida, y en la autonomía de cada ser para decidir cuándo cambiar, o marcharse de este mundo.
    Respeto y Dignidad, la vida misma.

    HOMEOPATÍA EN EL EMBARAZO, PARTO Y POSTPARTO.
    No éramos homeópatas ni lo somos tras este seminario, pero conocimos con Susana Aikin los principios en los que se basa la homeopatía unicista, y la intención de curar desde el centro del organismo. Nos compartió una imagen para entender la salud: una cebolla cuyo centro sería nuestra vida fetal, y las siguientes capas se fuesen creando sobre ese centro, compensando durante toda la vida el desequilibrio de esas primeras capas, a no ser que se sane. Lo grande de la homeopatia, en su opinión, era que podía volver atrás y trabajar esas primeras capas.
    Aprendimos varios remedios homeopáticos de los que poder hablar con la mujer que acompañemos, como una de las posibilidades de apoyo para el parto y el postparto, que podría elegir sin temor puesto que no conllevan efectos dañinos para ella ni para el bebé (siempre que se tomen en la medida indicada).

    ResponderEliminar

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.